La harina de amaranto es alta en proteínas y tiene un aroma muy agradable, con un ligero toque a frutos secos. Debido a que no contiene gluten es mejor utilizarla en combinación con otro tipo de harinas para conseguir una buena cohesión entre los ingredientes y también para que la textura de nuestro pan (o también si vamos a hornear un postre) sea agradable: tierna, con una miga esponjosa y aireada.
Para elaborar este delicioso pan mezclé tres de mis harinas favoritas de El Granero Integral: harina integral de trigo, de espelta y de amaranto; todas ellas de cultivo ecológico como siempre. El resultado es un pan con una miga muy tierna pero resistente, fácil de cortar en rebanadas finas si queremos tostarlo y el acompañamiento ideal en nuestras comidas. Me encanta disfrutarlo junto a un plato de caldo vegetal, pero he de confesar que esta hogaza cortada en pequeñas porciones, tostada y untada con una capa generosa de mi paté vegano de tomates secos es un auténtico placer para el paladar. Como lleva aceitunas Kalamata (de origen griego) y tomates secos es un pan que igualmente apetece disfrutarlo solo o con un chorrito de aceite de oliva virgen extra a la hora de la merienda.
Podéis amasarlo con una batidora de las que incluyen unos ganchos amasadores o amasarlo a mano (yo siempre combino los dos métodos).
Ingredientes:
- 35 g de harina de amaranto de cultivo ecológico de El Granero Integral
- 70 g de harina de espelta integral de cultivo ecológico de El Granero Integral.
- 200 g de harina de trigo integral de cultivo ecológico de El Granero Integral
- 1 cucharadita de sirope de agave de cultivo ecológico de El Granero Integral
- 9 g de gluten de trigo de El Granero Integral
- ½ cucharadita de sal marina gruesa de cultivo ecológico de El Granero Integral
- 60 ml de agua tibia
- 2 cucharaditas de levadura seca
- 180 ml de bebida vegetal de avena (o de soja)
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 65 g de aceitunas Kalamata, deshuesadas y cortadas
- 25 g de tomates secos
Preparación:
Unos 15 o 20 minutos antes de amasar el pan debemos dejar los tomates secos dentro de un cazo pequeño con agua templada para que se rehidraten y queden más tiernos. Escurrir bien y trocear.
En un bol pequeño (o en el bol de nuestra batidora amasadora) mezclamos el agua tibia con la levadura y el sirope de agave, lo dejamos reposar durante 5 minutos para que la levadura se active. Veremos que transcurrido ese tiempo el líquido se ha vuelto espumoso.
Añadimos las harinas, gluten, sal, leche y aceite. Amasamos durante unos 5-8 minutos o hasta que la masa se vea elástica. Si el amasado lo hacéis a mano seguramente necesitaréis unos cuantos minutos más.
Es importante recordar en este punto que las aceitunas estén bien escurridas para que no añadan una humedad excesiva a la masa.
Espolvoreamos la superficie de trabajo con harina y añadimos a mano tanto las olivas como los tomates secos a la masa de nuestro pan. Iremos añadiendo cucharadas extra de harina de trigo para que no nos quede una masa demasiado pegajosa y resulte más fácil de manejar. No os asustéis si al principio la masa se pega demasiado en las manos, es normal ya que las aceitunas y los tomates han añadido un poco más de humedad.
Formamos una bola y la introducimos dentro de un recipiente hondo y ligeramente engrasado con aceite. Cubrimos con un trapo húmedo y dejamos reposar en un sitio cálido y alejado de corrientes de aire, hasta que doble su volumen. Alrededor de una hora y media.
Cuando la masa haya crecido la aplanaremos con las manos para que se escape el exceso de gas, le damos forma redondeada de nuevo y la ponemos sobre una bandeja de horno previamente forrada. Cubrimos con el paño de cocina y dejamos reposar durante 45 minutos.
Precalentar el horno a 190 ºC. Realizar unos cuantos cortes a la parte superior del pan con un cuchillo bien afilado y hornear de 20 a 25 minutos. Un truco: para saber si se ha cocido bien lo golpeamos ligeramente con los nudillos, si suena hueco es que el pan ya está listo.
Una vez horneado lo pintamos con una fina capa de aceite de oliva para que la corteza quede más tierna y con un color marrón tostado muy bonito. Lo dejamos enfriar completamente sobre una rejilla antes de cortar.
Autora de la receta: Cinnamon Girl | Blogger de cocina | @cinnamongirlbcn en Facebook | @cinnamongirlbcn en Instagram | @cinnamongirlbcn en Twitter | Blog: http://www.cinnamongirldelights.blogspot.com.es/
La información contenida en esta web tiene un carácter informativo, divulgativo y/o comercial. Consulte siempre con su especialista.