Seguramente hayas escuchado alguna vez que el cerebro se divide en dos partes, derecha e izquierda, y que cada una realiza actividades muy diferentes entre sí, llegando a caracterizar incluso a las personas: si tienes vocación artística usas más el lado izquierdo, mientras que si tiendes al pensamiento matemático, usas el derecho. Afortunadamente, la neurología ha descubierto que ambos hemisferios actúan en conjunto en todas las actividades que realizamos, o sea que no es como si se paralizara uno u otro en función de lo que hagamos. Lo que ocurre en realidad es que un hemisferio u otro indica mayor actividad cerebral.
No obstante, sí existen diferencias entre el hemisferio derecho e izquierdo, y se podrían resumir en cuatro:
Digamos que por mucho que haya diferencias, lo fundamental es que ambas partes se complementan para que, sencillamente, vivamos y pensemos sin darnos cuenta de ello. ¡El cuerpo humano es una máquina increíble!