¿Conoces los beneficios de la acerola? La Dieta Mediterránea destaca por una extensa lista de alimentos que forman parte de nuestra cultura gastronómica y con una importante riqueza nutricional. Frutas y verduras de temporada forman parte de esta lista. En los meses de invierno es fundamental incorporar cítricos como las naranjas, los limones o las mandarinas. Es conocido el aporte de vitamina C de este grupo de frutas que oscila entre unos 40-60 mg de vitamina C por 100 g de alimento. Pero la naturaleza esconde otros frutos cuyo contenido en vitamina C, ¡ronda los 2000 mg de vitamina C! Es el caso del camu-camu o de la acerola, frutas tropicales originarias de América central, Brasil, Colombia o Las Antillas.
La acerola, el fruto del arbusto Malpighia glabra L. es una de las principales fuentes de vitamina C de la naturaleza, con un aporte de entre 1.000 – 2.300 mg por cada 100 g (dependiente del suelo, la recolección, la climatología…). También aporta hidratos de carbono, provitamina A, ácido pantoténico, tiamina, niacina, riboflavina, polifenoles, taninos, flavonoides, antocianinas y otros fitonutrientes. Esta compleja composición nutricional confiere al fruto acerola y su jugo, propiedades antioxidantes y de apoyo al sistema inmunitario.
La vitamina C es una vitamina soluble en agua y cofactor esencial para la síntesis de colágeno, carnitina y el metabolismo de las catecolaminas (como la adrenalina o la dopamina) así como para la absorción de hierro dietético. El ser humano no es capaz de sintetizar vitamina C, por lo que se obtiene estrictamente a través de los alimentos, en especial frutas y verduras frescas.
Si la respuesta es no, te podrías beneficiar de nuestro complemento alimenticio ACEROLA BIO. Elaborado a base de jugo de acerola procedente de cultivo ecológico este complemento ofrece una solución vegana para un aporte extra de vitamina C natural, que ayuda:
Así, con cada cápsula aportamos 82,5 mg de vitamina C natural, que puede beneficiar a las personas que no consumen frutas y verduras frescas en cantidad suficiente, los deportistas, las personas que sufren de estrés, los fumadores o las personas que viven en zonas de alta contaminación atmosférica, así como en caso de anemia ferropénica (por falta del mineral hierro).