¿Cuál es el secreto de la felicidad? ¿Cómo podemos vivir cada momento como si fuera único? ¿Se puede ser optimista al cien por cien? Existen diferentes opiniones, y muchas están enfrentadas, pero desde El Granero Integral nos gusta pensar que sí, se puede disfrutar de la vida, y es más fácil de lo que imaginamos. Siendo claros, a todos nos vendría bien esa solvencia económica relacionada con la clave de la felicidad plena, pero si todavía no la tenemos, ¿por qué basar nuestro bienestar en ella? Partiendo de esa base, la felicidad podría estar… ¡en cualquier sitio!
- Diviértete hasta con las cosas pequeñas. Un pequeño yate, un pequeño chalé, una pequeña fortuna… ¡es broma! Ahora en serio: la mejor manera de vivir la vida con una sonrisa es disfrutando al máximo de cada pequeño triunfo obtenido en el día a día, desde una felicitación en el trabajo hasta un intercambio de sonrisas mientras haces la compra. La amabilidad es la mejor amiga del optimismo, y la vida está para celebrarla.
- Celebra el éxito propio y ajeno. La vida es más grande cuando se comparte. De la misma manera, la felicidad que se comparte es más duradera y gratificante, por lo que sería genial que compartieras todo lo bueno que te pasa con tus seres queridos. Y viceversa, claro: alégrate por ellos como si fuera mérito tuyo.
- Organiza tiempo para ti. Hacer planes con amigos es genial, pero aun así, es lógico pensar que en algún momento necesitas tiempo para ti mismo. Quizá para tus proyectos personales o artísticos o solamente para desestresarte y desconectar de la rutina, un momento de intimidad siempre ayuda a poner las prioridades en su sitio.
- … y que sea de calidad. Aprovechar el tiempo no significa que debas invertir cada hora libre de tu vida en algo y seas totalmente productivo. O sí, si incluimos descansar. Aquí, la calidad supera a la cantidad. Tanto si es en pareja, en grupo o en solitario, intenta que ese tiempo sea ideal y refrescante para ti. No todos los días debes ser eficiente. Tomarse un respiro, cuenta.
En resumen, intenta divertirte con todo lo que te pase, incluso las cosas pequeñas; celebra los éxitos propios y ajenos e invierte tiempo de calidad en ti mismo tanto como inviertes en los que más quieres. El truco de la vida está en vivirla. ¡A por ella!
