Que la música tiene un efecto balsámico ya lo hemos comentado en repetidas ocasiones, como cuando exploramos el poder de la música y sus efectos en las personas con sinestesia; incluso hablamos del famoso Efecto Mozart, que se decía que la música de Mozart mejoraba las capacidades intelectuales de los niños. Pero este fin de semana dejamos de lado la investigación para ofrecerte una playlist acorde con un domingo: tranquila, acogedora y relajante. Eso sí, sin olvidar que el verano está a la vuelta de la esquina. ¡Disfruta!